Ah Wech Tum
El armadillo de Piedra
un cuento para pintar un mural

Don Gabriel Cahuach tiene un perro que ha cuidado desde que se lo regalaron pequeño, es cazador y un dia levanta un armadillo. El hombre consigue darle un machetazo en la cabeza, pero escapa y ambos animales se pierden de vista.





Don Gabriel va tras el rastro de gotitas de sangre sobre las hojas del bosque y descubre que han entrado en una cueva estrecha. Con grande esfuerzo entra el tambien. Llega all fondo hay tres escalones y se sale a un tunel sinuoso; por tres veces se encuentra derrumbes que tiene que limpiar con esfuerzo. Enciende un mechon de Ocote para poder ver ya que la oscuridad lo abraza.

Llega a una estancia donde esta el perro ladrando con los pelos erizados y los ojos de fuego, quieto sin apartar la vista de una mesa de piedra central que tiene ricos labrados en cada esquina. Alli esta el armadillo, pero se ha convertido en piedra, aunque gotea sangre por el tajo que le dio en la cabeza. Eso le hace sentir miedo, tanto miedo...

Don Gabriel intenta entonces salir por donde entro....pero un par de Cascabeles amenazantes se lo impiden.
Mira alrededor y ve que todas las paredes estan labradas con dibujos y figuras de colores que no entiende, hay ademas una serpiente labrada y una mano que señala a un punto de la estancia...Sigue esa direccion y encuentra otra, y otra mas piensa que puede indicar la salida.





Delante de la mesa de piedra hay una mesa llena de figuritas de Jade y antes de salir hecha en su Matate gran cantidad de esos objetos. En ese instante comprueba que no puede moverse pesa mas y mas; solo cuando deja el jade en su sitio empieza a sentirse ligero de nuevo y a caminar. De repente llega hasta otra salida y deslumbrado por el sol, cae al vacio sobre el Rio Grande. Recupera el sentido en la playa de arena blanca donde esta su perro junto a el.









Desde aquella vez, siempre que pasa Don Gabriel por el lugar siente espanto. A veces sueña con el hecho. La gente a las que ha contado su experiencia lo tratan de loco, se Burlan de el o le dicen que no cuente mentiras.


Este Cuento es propiedad de la gente del Itza... Con todo permiso de Tata noi.